La participante salteña, Mariana Salcés, se ha sentido aislada en la casa y en un momento del día se pudo ver que llegó a pensar en presionar el botón rojo del confesionario.
"Yo siento que no encajo", aseguró Mariana que aclaró "No me voy a poner a llorar, pero creo que me van a mandar a placa". Además, se refirió al motivo por el cual entró a la casa de Gran Hermano 2012. "Yo quiero ganar la plata", confesó.
Incluso contó que fue criada por su madre que siempre estuvo soltera. "Quisiera ganar para que con esa plata devolverle todo lo que me ha dado en la vida", aseguró la chica de Salta. "Me gustaría ayudarla ahora yo", soltó en diálogo con Victoria.
A la joven representante salteña se la pudo ver emocionada durante el día. Según ella misma, aseguró que extraña mucho a su familia y tiene miedo de ser una de las primeras nominadas por sus compañeros.
En la tarde del martes, se pudo ver cómo la niña de Salta se arrepentía de haber ingresado a la casa de GH2012. "Yo pensaba que me la iba a bancar", reflexionó. "Sé que estoy un poco callada y alejada de todos, pero no me puedo poner a llorar delante de todos y hacer un escándalo", indicó.
"Nunca en mi vida me vieron llorar, ni siquiera mis amigas", contó y adhirió "Acá al cuarto día ya me caían las lágrimas". Y remarcó "Estoy muy mal. No la estoy pasando bien". Para finalizar, Mariana se sintió dolida porque fue una lucha poder entrar a la casa y ahora se siente que no puede continuar en el reality. "Yo creo que es una lucha contra mí misma", detalló.
Para colmo, la Salteña nunca estuvo lejos de su casa y ésta es la primera vez que se aisla de sus familiares. "Me siento mal y quisiera apretar el botón rojo", amenazó.TLFXSIEMPRE.
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