Con 33 millones de euros anuales, Lionel Messi, ese duende capaz de gambetear hasta su propia sombra, encabezó la selecta nómina de los 10 futbolistas mejores pagos del planeta fútbol. Su impresionante contrato con el Barcelona, más otros acuerdos por derecho de imagen, hicieron que la Pulga no solo sea el jugador más destacado del mundo, sino también el mejor remunerado.
Con mayor chapa marketinera que presente futbolístico, David Beckham se quedó con el segundo lugar. Lejos de los flashes del fútbol grande, el inglés que ahora juega en Los Angeles Galaxy de la liga estadounidense, percibió 31 millones de euros. Muy cerca quedó Cristiano Ronaldo, quien logró ubicarse en el tercer lugar del podio.
Sus excéntricos dribblings portando la camiseta del Real Madrid fueron suficientes motivos para que el club merengue depositara 30 millones de euros en la cuenta bancaria del portugués.
Roberto Assis, representante y hermano de Ronaldinho, fue por un instante el más habilidoso de la familia a la hora de acordar el contrato de su representado con el Milan. El risueño brasileño ya no deslumbra como antes, y pese a desplegar su talento en cuentagotas, se quedó con el quinto lugar del ranking, generando 17 millones de euros anuales.
En el sexto puesto vuelve a aparecer un argentino. Es Carlos Tevez, el jugador del pueblo que semana a semana ilusiona con su fútbol a los hinchas del Manchester City. Durante 2010, el Apache ofreció gambetas y goles a cambio de los 15 millones de euros provenientes de las cuantiosas arcas de los recientes propietarios árabes del club inglés.
Sin importarle demasiado su pasado por el Inter, Zlatan Ibrahimovic no dudó un segundo en estampar su firma para jugar en el acérrimo rival de la ciudad, el Milan. Fueron 14 millones de buenas razones las que convencieron al sueco para cambiar de vereda. También esa misma cifra fue la que recibió el ingles Frank Lampard, crack del Chelsea y futbolista local mejor pago de la Premier League, para quedarse con el octavo lugar del ranking.
El noveno puesto fue para el camerunés Samuel Eto'o. La Pantera, tan polémico por su carácter como letal dentro del área, percibió 12 millones de euros para convertirse en el jugador africano mejor pago del mundo. Finalmente, el español Carles Puyol, capitán y bandera de la Selección campeona del mundo, cerró la lista gracias a su cosecha de 12 millones de euros en ganancias.
Para 2011 se estima que esos números irán en aumento, por lo que estos supercracks serán aún más millonarios que en la actualidad. No hay duda que para ellos el fútbol es mucho más que un deporte o una profesión. Es un negocio redondo, tanto como una pelota.
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