Banfield enderezó la clasificación con dos cabezazos de Ramírez. Después se floreó: un grito de Erviti y un penal de Lucchetti para asegurarse un lugar en octavos de final. Ahora, el actual campeón del fútbol argentino espera rival.
Si el Banfield campeón del campeonato local se hizo fuerte a partir de los goles del uruguayo Silva, éste busca lograr la misma contundencia a partir de los pases a la red de Tito Ramírez. El goleador que no pudo rendir en Racing, se destapó desde que llegó al Taladro y no para de meterla. Con los dos que le metió al Cuenca, el ex Colón aseguró la clasificación para los de Falcioni a los octavos de la Copa.
Claro que no la tuvo sencilla ante el ya eliminado Deportivo Cuenca. En los 45 iniciales, los del sur se mostraron apurados por llegar al gol y eso hizo que estuvieran imprecisos en el control del balón. La cabeza de Ramírez apareció a los dos minutos del segundo tiempo para darle la tranquilidad a todos los hinchas de Banfield. Veinte minutos más tarde Tito volvió a facturar, pero no a liquidar el encuentro. Porque los ecuatorianos no bajaron los brazos y descontaron con un golazo de Méndez al ángulo.
A esa altura, un empate de los ecuatorianos hubiera dejado afuera al equipo argentino. Para tranquilidad de Falcioni, Erviti aprovechó un error defensivo para el tercero y en el final Lucchetti facturó un penal para repetir el resultado conseguido en Cuenca. De esta manera, Banfield logró la clasificación como segundo del Grupo 6, ya que Nacional de Montevideo venció por 2-0 a Morelia y se aseguró el primer puesto.Olé