El arquero de la Selección volvió a cargar contra la polémica Jabulani y admitió que debió cambiar la forma de responder a determinadas situaciones para evitar problemas.
"Con esta pelota no podés dudar. En el segundo tiempo despejé una con los puños porque no quise tomar ninguna responsabilidad aparte de la que tengo que tomar. Tengo que darles confianza a mis compañeros, soy el último hombre". Pese a la victoria en el debut, no desapareció la preocupación de Sergio Romero por la pelota del Mundial.
En declaraciones televisivas, agregó: "Vi lo que les pasó a los arqueros de Inglaterra y Argelia (Robert Green y Faguzi Chaouchi, respectivamente)… en un Mundial no podés dudar ni un minuto, porque la pelota se te va adentro".
Y cerró su crítica contra Jabulani, la pelota de la discordia: "La FIFA o los que arman la pelota quieren que haya más goles. Es algo positivo para el juego, para atraer a la gente. El jugador se tiene que adaptar a lo que hay. En la Liga holandesa la pelota es muy pesada y hay que adaptarse a todo".
Respecto del equipo argentino y su falta de regularidad a lo largo de los noventa minutos, Romero analizó: "Creo que tenemos muy buenos jugadores de mitad de cancha para arriba. Por más que Jonás (Gutiérrez) suba, queda una línea de cuatro con Masche y siempre quedamos bien parados atrás".
Por último, destacó el apoyo del entrenador de la Selección, Diego Maradona: "Simplemente me viene diciendo lo que me dijo siempre. 'Demostrá seguridad, hablá con Masche para que ordene a los defensores'. Ayer me agradeció y me dijo que en las que tenía que estar, estuve. Me abrazó como cinco veces".
